Estilistas y las mujeres


"Sabía que no hay nada más nocivo para la personalidad de una mujer que el mariquita que la pone en un altar disfrazándola con la personalidad que él hubiera deseado para sí"

Terenci Moix, Garras de astracan.

El de "estilísta" es uno de los trabajos más ridiculos que hay. Entiendo que hay ciertas personas, cuyo trabajo les obliga a estar delante de las cámaras, por lo que deben lucir siempre su mejor aspecto. A menudo, esas personas, a pesar de ser una eminencia en su campo, carecen de la cultura y las ganas necesarias para "jugar" a la moda.

Sin embargo, creo que un personaje público debería tener la suficiente seguridad y vivencias, como para saber presentarse en distintas situaciones. No descarto el uso de un estilista en determinadas ocasiones, pero creo que debería ser como un abogado: se le consulta para situaciones muy concretas, las demás, sabemos como llevarlas nosotros solos.

No es mi intención herir sensibilidades con la frase que pongo al principio. Aunque ciertos políticos no la vean, hay una sutil diferencia entre ser políticamente correcto y ser educado. No soy políticamente correcto pero intento ser educado, lo cual no quita para que en mi blog diga lo que quiera. Por lo tanto, si alguien se siente ofendido, mis disculpas.

7 comentarios:

dijo...

jajaja ésa es la cuestión: uno 'debería' saber cómo vestir en cada ocasión... pero la realidad hace que tenden ganas de gritarles que se busquen a un maldito estilista!

dijo...

no lo había pensado, pero me parece un planteamiento interesante... la comparación con el abogado, quiero decir.
por otro lado está el mencionadísimo caso de las zoettes: todas terminaron viéndose igual. qué sentido tiene pagarle a alguien para que aplaste tu personalidad. bueno, aunque a vecs tampoco es que hubiera mucha personalidad que aplastar, la verdad.

dijo...

A veces se nota que no están convencidas de lo que se ponen por sus caras o porque preferirían irswe con un caftán. Las celebridades con estilistas son como Barbies, o como las esposas robot de esa novela de Ira Levin. Para lograr un look memorable se necesita convencimiento.

Saludos!!

dijo...

Creo que tienes toda la razón del mundo. Lo que pasa es que ahora todos los personajes públicos quieren vender "su imagen de marca" para que le salgan mas contratos en cualquier campo y solos no saben hacerlo, por eso, tiran de estilista, del estilista que hace triunfar a otro intentando que con el haga lo mismo... No es por el "no saber o saber estar"

Un beso

dijo...

Clochard: A veces es mejor vestir "mal" pero a gusto que bien y sentirse incomodo.

Botica: Un buen estilista debería ser capaz de encontrar algo que no "aplaste" la personalidad.

Aldo: Totalmente de acuerdo con lo del convencimiento. Una vez más, creo que es mejor vestir mal para ir aprendiendo. Me gusta la teoría del ensayo-error como medio de aprender.

Wednesday: Tienes razón, no el el "no Saber" es más bien la pereza o la falta de confianza.
De todas formas, remitiendome al post, creo que se debería consultar al estilista solo en determinadas ocasiones.

dijo...

Tienes razón, a mi me gustaría que nadie utilizará estilistas, la imagen sería muy reveladora y menos engañosa en lo que respecta a la personalidad verdadera del personaje en cuestión. Pero que se le va a hacer, a alguna gente vestirse les parece algo aburrido y les da pereza. Julia Roberts debe ser una de esas personas y no solía dar pie con bola, pero debió encontrar un estilista y ahora no va tan mal. Saliéndome del tema de los personajes públicos, creo que circulan por ahí muchas estilistas frustradas. De esas que no se conforman con comprar su ropa y la de sus hijos sino que también visten de pies a cabeza a sus novios o maridos. (Y eso que comprar ropa de hombre tiene que monótono, yo sólo lo haría en un caso severo de daltonismo). No es que esos hombres sean incapaces de comprarse la ropa, lo único que les pasa es lo que a Julia Roberts que el tema les aburre.

dijo...

Alexandra: Creo que el problema es que los americanos son gente de extremos. O van hechos un asco o van perfectos. No saben encontrar el punto medio (me has dado una idea para el post de mañana, gracias)

¿Estilistas frustradas? Muchas. Como dices, viven de la pereza de cierta gente. A mí personalmente no me gusta ir de compras, pero intento ser lo más matemático posible. Solo hay que escoger unas pocas prendas que convienen entre ellas e ir mezclandolas. El problema es que la gente no ve la utilidad de la ropa más allá del abrigo. Éste tema tiene muchas ramas.