El olor de la memoria


Hoy me he levantado cursilón y no hay quién me saque de ahí. Así que lo siento pero va un post pastelón. Estaría bien tener unas fotos de las cosas bonitas de mi cuarto en tonos pasteles pero no es el caso.

El tema son los perfumes. Se dice que el olor es una de las cosas que más activan los recuerdos. Y estoy de acuerdo. Es increíble todo lo que puede hacernos recordar una ráfaga de cualquier olor. A veces incluso momentos que teníamos guardados en lo más profundo de la memoria.

Supongo que es en eso en lo que se inspiran para los anuncios de perfumes. En las sensaciones que nos produce recordar un momento dado. Reconozco que antes no entendía muy bien estos anuncios, de hecho tampoco es que ahora los entienda mucho más, pero se puede decir que ahora me “transmiten” más. Después de todo, en marketing se consideran los perfumes uno de los productos más difíciles de vender.

El perfume que más me evoca es el de Kenzo. Ese olor masculino, diferente y algo dulce me recuerda a algunos de los mejores momentos de mi vida. A siestas de toda una tarde, en la penumbra de la primavera. A locos paseos en bicicleta y a las primeras camisetas de manga corta del año. Por supuesto me recuerda a la persona, pero sobre todo a los momentos y a esa luz especial que parecen tener ciertos recuerdos.

Que los perfumes que despiertan nuestros recuerdos no dejen nunca de fabricarse.

He avisado que estaba con día cursi.

8 comentarios:

dijo...

No creo que hayas sido pastelón. Simplemente pienso que como publiqué una vez en el blog no hay pasado sin olor. Me cuesta cambiar de perfume, y creo que siempre que lo he hecho ha coincidido que una etapa de mi vida se ha cerrado. Por algo será. Besos

pdt: Respecto a la pregunta del post anterior solo se me ocurre una cosa ¿la dignidad?

dijo...

Yo todavia no he cambiado de perfume, y de momento no tengo planes de hacerlo pero supongo que sí que estaría relacionado con el paso de una época a otra.

Replanteo la pregunta. ¿cuánto vale tu dignidad?

dijo...

¿Cuanto vale mi dignidad? Supongo que mucho porque no me quedo en ropa interior bajo ningún precio. Hay cosas que se hacen sin moneda de cambio;)))).

dijo...

Es inevitable oler ciertos perfumes y no pensar en momentos que ya pasaron. A mí el Poeme de Lancome me huele a mi madre, Angel de Mugler a mí con diecinueve alucinando con la moda del momento...

dijo...

Sr Q: Nunca me han gustado demasiado los de Mugler...
Algo me dice que a mi yo de 19 años no le habría gustado nada tu yo de 19 años.

dijo...

Nunca me hubiera podido imaginar que los perfumes eran lo más difícil de vender. Si todo el mundo fuera como yo las empresas fabricantes de perfume tendrían un filón. Aunque la verdad es que no me suelen influir los anuncios, los elijo después de probar muchos en las tiendas.
Que recuerde ahora los olores que me evocan recuerdos no son de perfumes.

Anónimo dijo...

Me parece muy lindo ese pensamiento, pero lamentablemente yo no tengo perfumes que me traigan recuerdos, eso si, ha de ser algo lindo que algo tan sencillo como una fragancia despierte miles de memorias.

Saludos!

dijo...

Alexandra: Es que, ¿cómo representas un olor?
Yo tambien tengo olores que no son de perfumes. Por ejemplo el olor a cloro me recuerda a mi infancia.

JuanP: Ya tendrás, tiempo al tiempo.