Daphne Guinnes y el auténtico lujo

Daphne Guiness


Y cuanta razón demuestra tener Daphne Guinness. ¿Cuántas veces nos vemos obligados a tragarnos nuestra forma de ser, nuestras preferencias más de lo que nos exigen los buenos modales?

Conozco a un chico, que por motivos que no vienen al caso,  debe comportarse como un Pelayo de la vida, cuando en realidad, el preferiría unos mocasines y un simple polo. 

Admitidlo, lo primero que a uno se le ocurre es exactamente lo opuesto. 

4 comentarios:

dijo...

Qué buena tu vuelta.

dijo...

Holly: Se agradece volver, y sobre todo ser bien recibido.

dijo...

Yo también me alegro de tu vuelta.
En cuanto al tema supongo que a veces hay que sacrificarse por el trabajo. Tu amigo por lo menos tendrá los fines de semana para vestir como quiera.

dijo...

Alexa: O sacrificar el trabajo...